En este artículo tenéis un resumen de cada uno de los capítulos de la novela «El ojo del mundo», el primer libro de la saga de novelas «La rueda del tiempo», escrito por Robert Jordan. Los datos básicos de este libro son:
- Fecha de publicación original: 15 de enero de 1990
- Autor: Robert Jordan
- Libro posterior: El despertar de los héroes
Y aquí viene el resumen de cada capítulo, perfecto para quien quiera saber de qué va este libro sin leerlo entero, o para quien lo leyó hace mucho y quiere recordarlo de forma rápida, o para quien quiere ver la serie y antes, o después, saber qué cuentan los libros, sin tener que leerlos enteros.
Prólogo
Lews Therin, el dragón, ha destruido todo, aunque parece que era un héroe de este mundo. Enfrente esta Elon Morin, Traidor de la Esperanza, su Nemesis. Habla de que se tienen que enfrentar eternamente mientras la rueda del tiempo sigue girando sin fin.
Capitulo 1 – un camino solitario
Rand Al Thor y su padre Tam llegan al pueblo de Campo de Emond. Llevan bebida a la posada. Parece que se ciernen tiempos oscuros en ese lugar. Muchos lobos y peligros.
Rand ha visto un jinete negro que transmite odio, que enseguida ha desaparecido. Hablan del Creador, protector del mundo con la Luz; y su Nemesis , el Oscuro, y los Renegados.
Mat (muy travieso) y Perrin (muy fuerte) son amigos de Rand.
Capítulo 2 – forasteros
Va a haber una festividad llamada Bel Tine. En la posada está reunido el Consejo del Pueblo. Han llegado un juglar y dos forasteros: Lady Moraine, una dama de alta alcurnia, y un soldado a su servicio, Lan. Moraine da una moneda a Rand y Mat para pedirles ayuda para recados. Tiene un Aura especial.
Capítulo 3 – El buhonero
El buhonero cuenta a todo el pueblo noticias de otras tierras. Dice que allá fuera están en guerra, en Ghealdan. Dice que se ha alzado el estandarte del Dragón, un nuevo Dragón ha nacido. La duda es si es falso o verdadero. La leyenda dice que cuando nazca el verdadero Dragón se acabará el mundo. Y que el último verdadero Dragón provocó el Desmembramiento.
El buhonero no sabe si es el verdadero Dragón pero sabe que puede encauzar el Poder Único. Las historias dicen que solo una mujer puede encauzarlo. Y que quien encauza el Poder Único solo puede ser vencido por las Aes Sedai.
Perrin, amigo de Rand, declara haber visto también al jinete misterioso de negro. Egwene, hija del alcalde y por quien Rand siente atracción, dice que son cuentos suyos.
Un hombre de cabellos blancos llega de repente.
Capítulo 4 – El juglar
Llega el juglar y está un buen rato hablando con los amigos. Nada importante, parece un charlatán. Luego los amigos hablan de su preocupación sobre el jinete negro y que nadie les crea, así que van a buscar más posibles testigos.
El pueblo está muy preocupado por la guerra , está cerca de su región, y temen que las Aes Sedai o el Dragón pasen por su zona. El Consejo del Pueblo les intenta calmar.
Tam le dice a su hijo Rand que ha oído que otros jóvenes han visto al jinete negro y que les cree. Pero que puede ser un exiliado de la guerra o un vulgar ladrón.
Capítulo 5 – La noche de invierno
Tam y Rand llegan a su hogar, una casa de campo. Es de noche, se disponen a cenar, cuando unas criaturas/bestias armadas irrumpen en la casa. Tam ordena a Rand esconderse en el bosque mientras él lucha. Son muchas criaturas.
Tam logra reunirse con Rand en el bosque. Le cuenta que son trollocs. Rand creía que eran seres de cuentos pero existen de verdad, y sirven al Oscuro, relata Tam, malherido.
Rand vuelve a la casa a por mantas y Bela, su caballo. Hay cadaveres de trollocs pero uno sigue vivo y le ataca. Rand logra matarlo con su espada. Antes de morir, el trolloc menciona a Myrddraal. Es un Fado, una criatura espeluznante. También dice que volverán más, así que Rand debe apresurarse a salir. Cogió algunas cosas útiles y volvió con Tam.
Objetivo: llevarlo al pueblo para que Nyaneve, la Zahorí, le cure.
Capítulo 6 – El bosque del Oeste
Rand recupera el carro, destrozado, lo arregla como puede y, sin caballo ni vaca, el mismo tira del carro poco a poco, lentamente, hacia Campo de Edmon, en total oscuridad. Tam balbucea delirando. Pero en un momento dado habla de que a Rand se lo encontraron abandonado y lo adoptaron.
Capítulo 7 – A la salida del bosque
Amanece, Rand llega al pueblo… pero está casi todo calcinado o destruido. Han sido loa trollocs. Egwene les recibe para llevarles con Nyaneve, quien tras examinar a Tam dice que no puede salvarle, que va a morir.
En la puerta de la posada del alcalde Bran han grabado el símbolo del colmillo de Dragón, una forma de llamar al mal. Bran dice que no sabe quién habrá sido. Narra que Moraine es una Aes Sedai y Lan un Guardia, y que han combatido de forma épica contra los trollocs.
Rand ha oído que las Aes Sedai pueden curar, aunque eso puede suponerle un precio muy alto a pagar. Aún así le pide ayuda y ella acepta.
Capítulo 8 – Un cobijo acogedor
Moraine empieza a intentar curar a Tam, con Rand y Lan presentes. Estos dos charlan y Rand les habla del jinete negro que vio. Lan cuenta que es un Myrddraal, un Semihombre, de los servidores más peligrosos del Oscuro.
Moraine acaba y dice que Tam se recuperará, aunque tiene que reposar algunas semanas. Ahora duerme. Ha usado un angreal, una reliquia mágica legendaria.
Moraine y Lan cuentan a Rand que el ataque no ha sido azaroso. Que buscaban a unos jóvenes de la edad de Rand para matarlos. A él y a sus amigos Perrin y Mat, que también han sobrevivido. Hay algo en ellos que provoca temor al Oscuro, cuentan.
Moraine le dice que tienen que irse y esconderse en Tar Valon, un sitio lleno de Aes Sedai y Guardianes. Deben partir esta noche, pronto volverán a por ellos al pueblo. Y sin avisar a nadie para no alertar a la gente. Pero antes de marcharse, Rand se duerme junto a la cama de Tam.
Capítulo 9 – Revelaciones de la rueda
Rand tiene un extraño sueño en el que acaba yendo a una torre blanca donde está el Myrddraal. Se despierta, sigue junto a Tam. Al poco Tam despierta, aún débil, y Rand le relata todo lo ocurrido con los trollocs y con su viaje a Tar Valon. Tam responde que ciertamente es allí donde estará más seguro pero que tenga mucho cuidado con las Aes Sedai y los Guardianes, que no se fíe. Lan llama a Rand, que se despide de su padre para partir.
Abajo hay problemas: la gente está frente a Moraine, gritándole que se vayan, que los trollocs han ido ahí por su culpa. Moraine les relata la historia de cómo la antigua ciudad de Manetheren resistió ataques de trollocs hace mucho tiempo, donde ahora está Campo de Aemon, y que deberían recordarles y llorarles, y los vecinos del pueblo se disculpan.
Lan, Moraine, Mat y Rand se disponen a partir.
Capítulo 10 – La partida
Acuden al establo a coger caballos y ahí se unen al grupo: Perrin el herrero, Egwene y Thom, el juglar. Salen del pueblo y Rand ve en el cielo una criatura a lo lejos. Le dicen que es un Draghkar, una criatura del Oscuro. Deben llegar rápido a Embarcadero de Taren.
Capítulo 11 – La ruta hacia Embarcadero de Taren
Galopan a toda prisa hacia el norte y llegan a Colina del Vigía. Ahí el Draghkar les detecta. Huyen deprisa y llegan a Embarcadero de Taren, librándose del enemigo. Ahí Lan va a la casa de un barquero, Maese Alta Torre, y le paga por partir ya a cruzar el rio Taren, aún de noche.
Capítulo 12 – La travesía del Taren
Cruzan el Taren en la embarcación de Alta Torre con seis de sus hombres. Tienen mala pinta pero no hacen nada. La travesía tiene lugar entre una espesisima niebla. Al llegar se hunde la barcaza y Lan les da dinero para que puedan adquirir otra. Los hombres se van y el grupo se vuelve a quedar solo.
Nada más dejar atrás la ribera del Taren se disipa la niebla, y es que había sido obra de Moraine para despistar al Draghkar. Seguramente por eso se hundió el barco.
Aprovechan para descansar en un bosquecillo cercano. Oyen al Draghkar, por el río buscándoles. Se refugian en una cueva hecha con árboles caídos. Moraine cuenta a Egwene historias sobre el Poder Único y le dice que percibe que ella podría encauzar el Poder y llegar a ser una Aes Sedai, pero para ello deberá estudiar mucho tiempo en Tar Valon. Egwene se entusiasma con la idea, mientras que a Rand le horroriza.
Capítulo 13 – Elecciones
Moraine cura a todos antes de dormir, duermen una hora y parten. Siete día después llegarán a Baerlon, a paso lento. Durante el trayecto Lan va instruyendo al grupo en el uso de las armas.
Los chicos hablan de escaparse solos a alguna ciudad pero Moraine les oye y les abronca: no pueden irse porque el Oscuro les persigue, y si van a huir prefiere destruirles ella misma antes de dejar que el Oscuro los coja.
Moraine y Egwene hablan a solas cada día: uno de esos días Rand las espía y oye a Moraine decir que hay otra mujer capaz de encauzar el poder en Dos Ríos. No dice quién.
Llegan a Barleon y Moraine les advierte de que han de pasar totalmente desapercibidos, y que se llamen por otros nombres . La ciudad es enorme y llena de gente. Está rodeada por un muro. Al ver llegar a Moraine el vigilante les deja pasar, ahí la conocen.
Este les cuenta que los Hijos de la Luz (Capas Blancas) están en la ciudad. Estos hombres persiguen al Oscuro pero son prepotentes y altivos, y odian a las Aes Sedai.
También cuenta que ha oído rumores de que el supuesto Dragon Renacido tiene miles de seguidores y que se dirige con su ejército hacia la ciudad de Tear. Pues una profecía dice que cuando caiga la fortaleza de Tear, el Dragón renacerá .
El grupo entra en la posada El ciervo y el león. El posadero recibe a Moraine (aquí la llaman Alys) con calidez y dice que les darán comida y cama.
Capítulo 14 – El ciervo y el león
Los hombres del grupo van a tomarse un baño en una sala con varias bañeras. Mat habla de trollocs y Lan les abronca diciendo que no hablen de nada en voz alta mientras estén ahí; han de pasar totalmente inadvertidos.
Lan cuenta lo que ha podido oír por la posada y confirma que en Ghealdan hubo una batalla de la que parece que salió victorioso Logain. Es la primera vez que mencionan el nombre del supuesto Dragón Renacido.
Rand se va a dormir y sueña que habla con Ba’alzamon, el Oscuro, quien le dice que aunque Rand sea el elegido, no tiene nada que hacer contra él, y que caerá como tantos otros antes. Al final de la pesadilla, el Oscuro mata a una rata.
Capítulo 15 – Extraños y amigos
Despiertan. Solo están en la posada Perrin y Rand; y Thom, contando historias en el salón central. Perrin, encamado porque se encuentra mal, le cuenta a Rand que ha tenido una pesadilla, que era igual que la que tuvo Rand. Quieren preguntar a Mat si también la tuvo él. Rand ha visto muchas ratas muertas en la posada, como pasó en la pesadilla de anoche.
Rand sale fuera y conoce a Min, una chica que estaba en la posada con Moraine el día anterior. Min dice que puede ver cosas en las personas que nadie ve. Y le cuenta que sabe quiénes son todos los del grupo y la identidad verdadera de Moraine y Lan.
Rand va a dar una vuelta por la ciudad, solo. Está repleta de gente, tiendas y posadas. Se encuentra con Padan Fain, el buhonero que suele acudir a Campo de Edmond. Sobrevivió al ataque de trollocs. Está muy deteriorado y nervioso. Rand le invita a ir con él a la posada y Fain dice que no quiere ver a una Ais Sedai por nada del mundo, y se va.
Luego Rand se encuentra con Mat, quien le confirma que también tuvo la misma pesadilla. Rand se empieza a encontrar cansado y aturdido. Deciden volver a la posada a pedir a Perrin que no cuente lo de la pesadilla a Moraine.
Por el camino tienen un pequeño enfrentamiento con tres capas blancas aunque se van sin que ocurra nada; y se encuentran a Thom, el juglar, a quien cuentan el sueño. Éste aconseja no contarlo aún a Moraine e ir rápidos a la posada a asegurarse de que Perrin no ha contado nada.
Encuentran a Perrin fuera de la posada. Dice que no ha contado a nadie lo de la pesadilla. Y les informa de que Nynaeve, la zahorí, ha llegado a la posada. Quiere hablar con los tres amigos.
Capítulo 16 – La zahorí
En la posada, Moraine y Nyaneve discuten ante el resto del grupo. Nyaneve quiere llevárselos de vuelta al pueblo y Moraine dice que están más seguros con ella.
Nyaneve le cuenta más tarde a Rand que Moraine sospecha que alguno de los tres amigos no nació en Dos Ríos. Rand sospecha que puede ser él, si es verdad que no es hijo de Tam como éste dijo delirando.
Capítulo 17 – Vigilantes y perseguidores
Rand fue a la gran sala, repleta de gente escuchando los relatos de Thom el juglar. Luego hubo música y todo el mundo bailó. Excepto un misterioso hombre junto a la chimenea con la cara marcada por una cicatriz que mira mucho a Rand.
Acaba la fiesta y Rand se encuentra por la posada con un Fado, un Myrddraal. Pregunta de manera amenazante dónde están los otros dos amigos, que hable o morirá. Rand no habla, el Fado desenfunda la espada para matarlo pero antes de clavársela se detiene y le dice que Rand pertenece al Gran Señor de la Oscuridad, y se va.
Lan acude corriendo, tras oír lo que ha pasado, y comunica a todos que deben irse ya, a medianoche, antes de que vuelvan más Semihombres.
Salen de la ciudad todos, incluida Nyaneve, que se une al grupo, solo para vigilar a Moraine, de quien desconfía. En la puerta de la ciudad 5 capas blancas (Hijos de la Luz) quieren impedir que se vayan, y Moraine entonces se vuelve gigante y aprovechan para huir.
Mientras cabalgan ven un incendio en la ciudad: deducen que los Hijos han incendiado la posada, por haber alojado al grupo.
Lan dice que posiblemente van a estar siempre en peligro hasta que lleguen a Tar Valon; que no hay sitio seguro.
Capítulo 18 – El camino de Caemlyn
Dejan atrás Baerlon y toman la ruta hacia Puente Blanco, para ir luego de ahí a Caemlyn. Por el camino oyen cuernos sonar, de los enemigos sin duda. Lan hace una expedición solo para ver qué es y son unos 500 trollocs dirigidos por un Semihombre, y están a punto de alcanzarles.
Se salen del camino pero son alcanzados. Lan lucha con el Fado y el resto del grupo con los trollocs. Lan decapita al Fado y los trollocs caen todos. Pero al poco, otro grupo les alcanza, esta vez con tres fados.
Entonces la Aes Sedai lanza un hechizo que provoca un terremoto que hace caer a los trollocs; y un muro de fuego entre ellos y los fados. Huyen y los dejan atrás, aunque siguen oyendo cuernos de más grupos de enemigos.
En la batalla anterior Mat ha gritado algunas palabras en un idioma desconocido para él y Moraine le dice que era el idioma del último rey, el antiguo grito de guerra de Manetheren.
Rand y Perrin se quedan pensativos valorando si Mat es descendiente de los antiguos reyes y es a él a quien persiguen los trollocs.
Llegan a una ciudad enorme pero en ruinas y despoblada. Moraine dice que se llama Shadar Logoth. También se conoce como Aridhol.
Capítulo 19 – Sombras en ciernes
La ciudad está en ruinas pero se ven restos de edificios impresionantes, altos y solemnes. Debió de ser una ciudad monumental. Se refugian en los restos de un gran edificio.
Mat, Perrin y Rand deciden salir a ver la ciudad sin avisar a nadie. Aparece un hombre que se presenta como Mordeth. Les dice que es un cazatesoros y que vayan con él para compartir los tesoros que ha encontrado.
Bajan a una zona subterránea y encuentran una sala repleta de tesoros. Pero allí Moreth se transforma en un enorme ser, grita: Estáis todos muertos, y se esfuma.
Huyen asustados sin coger ningún tesoro, y llegan al refugio con los demás. Durante la huída les ha parecido sentirse observados. Cuentan lo que ha pasado y Moraine se sobresalta al oír el nombre de Mordeth. Les cuenta su historia: fue un antiguo consejero de esa ciudad, que provocó su declive y destrucción. Lleva siglos ahí vagando y quién acepta regalos suyos o es tocado por él , muere. No ha sido el caso y los amigos se han salvado.
Lan vuelve de una vuelta de reconocimiento. Ha visto unos 100 trollocs en la ciudad, tienen que huir antes de ser encontrados.
Capítulo 20 – Diseminados por el viento
Al salir de la ciudad, un tentáculo de niebla separa a Moraine y Lan del resto del grupo. Es Mashadar, un ente demoníaco sin conocimiento pero que provoca la muerte al tocarlo. Quedan en separarse y verse de nuevo en el río, ahí Moraine les buscará.
Pronto aparecen trollocs y todos huyen por separado. Van huyendo de trollocs, Fados y la niebla. Rand se reencuentra con Mat y luego con Thom, ya en las puertas para salir de la ciudad. Huyendo acaban topándose con un barco en el río donde se suben y, pagando con monedas, convencen al capitán para que les lleve. El capitán acepta llevarlos hasta Puerto Blanco.
Por otro lado Perrin y Egwene también se encuentran y huyen juntos, aunque Perrin cae al río Arinelle, del que sale por una orilla tras un rato siendo arrastrado.
Capítulo 21 – La voz del viento
Nyaneve se despierta, sola. Camina un rato y se topa con Moraine y Lan. Se oculta para escucharles pero Moraine descubre su presencia y la hace salir. Nyaneve les acusa de ser culpables de la desaparición del resto del grupo.
Moraine, paciente, le explica a Nyaneve que ve en ella un gran potencia para dominar el Poder Único y ser Aes Sedai. Nyaneve se resiste pero a su vez sabe que es verdad (ella odia a las Aes Sedai).
Moraine anuncia que va a ir a buscar a Rand y Mat, pues son a quienes busca el Oscuro, y el objetivo de Moraine es oponerse a todo lo que haga el Oscuro.
22 – La senda elegida
Perrin despierta en la orilla y, tras caminar un rato, se topa con Egwene y con Bela, su caballo.
Deciden a dónde ir ahora. Aunque Puerto Blanco parece el sitio idóneo, temen que ahí les esperen más fados. Así que eligen ir a Caemlyn, donde confían que no haya enemigos pero sí vaya Moraine a buscarlos.
23 – Hermano lobo
Perrin y Egwene caminan un par de días, sin saber si están en el camino correcto a Caemlyn, y pasando mucha hambre. Al tercer día se topan con un hombre, Elyas Machera, que les da de comer conejo asado. Va acompañado de cuatro enormes lobos que son sus amigos. Cazan juntos y se hacen compañía. Elyas les dice que no van camino a Caemlyn.
Charlan y Elyas les pregunta quiénes son y qué hacen allí. Egwene se inventa una historia (no quieren contar la verdad a desconocidos por si están con El Oscuro) pero Elyas dice que toda la historia es mentira. Dice que los lobos se lo han transmitido. Tanto los lobos como Elyas tienen ojos amarillos. Elyas dice que ahora cuenten la verdad. También desvela que los lobos dicen que Perrin podría llegar a entender a los lobos.
Perrin la cuenta, ahora sin mentiras. Afortunadamente Elyas y los lobos odian a trollocs y semihombres y les ofrece quedarse con él, bajo su protección.
Perrin y Egwene rechazan la ayuda pero Elyas dice que aún así , les acompañarán hacia el sur.
24 – El descenso por el Arinelle
Rand vuelve a tener un horrible sueño donde vuelve a toparse con Ba Alzamon. Despierta en el barco.
Rand, Mat y Thom están preocupados por Gelb, el marinero que debía estar haciendo guardia cuando ellos se colaron en el barco. Gelb les odia y temen que haga algo. También creen que el resto de la tripulación pueda ir en contra de ellos. Thom les entretiene para calmarlos y finge que Mat y Rand son sus aprendices de juglares.
25 – El pueblo errante
Elyas y los lobos, Egwene, Bela y Perrin siguen caminando durante unos días hasta que se topan con un campamento de gitanos. Comentan que tienen fama de ladrones.
Los gitanos les reciben con amabilidad y les invitan a comer con ellos. El jefe del clan se llama Raen y tiene título de buscador.
Elyas cuenta a Egwene y Perrin que Los gitanos van viajando por el mundo buscando lo que ellos llaman “la canción”, que es una canción que les hará ir al paraíso. Dicen que perdieron esa canción en el desmembramiento del mundo, hace 3000 años.
Cenan juntos, y el jefe del clan les cuenta que escucharon la historia de una mujer que asegura que el oscuro quiere acabar con el mundo.
26- Puente Blanco
El barco con Thom, Rand y Mat llega a Puente Blanco. Efectivamente hay un puente blanco gigante en la entrada, con más del doble de la altura del barco. Nada más llegar, el capitán echa a Gelb del barco.
Los tres amigos van a buscar a Moraine, Egwene y los demás . Entran en una posada para preguntar. El dueño, amable al comienzo, les pide irse en cuanto ellos preguntan por sus amigos. Y es que un Fado también preguntaba por ellos en la posada días atrás y varios días.
Se van de la posada y se topan con un Fado en medio de la ciudad. Thom les dice a Rand y Mat que vayan corriendo a Caemlyn, a la posada La bendición de la Reina. Y les grita que huyan ya mientras se lanza a atacar al Fado. Muere en el intento, pero los dos amigos logra salir corriendo de la ciudad.
27 – Al abrigo de la tormenta
Perrin, Egwene y Elyas siguen viajando con los gitanos, a ritmo muy lento. Perrin insiste cada día en seguir la marcha solos pero Elyas dice que tienen que aprovechar para descansar, puesto que los gitanos les dan comida y cama.
Pero llega un día en que Perrin tiene una pesadilla con El Oscuro. Elyas y los lobos parece que han vivido el mismo sueño y ahí acuerdan que es el momento de dejar al Pueblo Errante. Se despiden y se separan de ellos.
28 – Huellas en el aire
Nyaneve reflexiona sobre la casi nula relación que tiene con Moraine a pesar de viajar juntas. Hablan poco y solo de cosas banales. Moraine le dice que Nyaneve tiene que controlar sus emociones si quiere controlar el Poder Único.
Llegan a Puente Blanco. Todo está en llamas. La gente cuenta a Moraine detalles sobre un barco que zarpó hace poco. Comen en la misma posada que Rand y el resto y Moraine capta que han pasado por allí. Confía en que habrán tomado camino a Caemlyn, así que ella, Lan y Nyaneve toman esa ruta.
29 – Ojos implacables
Elyas avanza a toda prisa, comprobando obsesivamente que nadie les vigila, y esforzándose en no dejar rastro. Egwene y Perrin no entienden por qué, ni los lobos detectan peligros. De repente una bandada de cuervos salen volando de un árbol, pueden ser espías de El Oscuro. Elyas dice que han de llegar a un lugar seguro que él conoce.
Siguen huyendo y cuando parece que los cuervos están a punto de alcanzarlos y atacarles, llegan al lugar seguro que Elyas decía. Se llama “stedding “ y es un lugar donde ninguna criatura oscura ni Aes Sedai pueden entrar. Ahí descansan.
30 – Hijos de las sombras
Continuará…
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